Anthony Joshua venció por nocaut a Jake Paul, pero perdió millones en impuestos

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La espectacular velada en el Kaseya Center de Miami dejó un sabor agridulce para Anthony Joshua. Aunque el británico reafirmó su jerarquía sobre el ring al derrotar a Jake Paul con un nocaut técnico en el sexto asalto, el verdadero "golpe" llegó después del combate: la carga tributaria devoró casi la mitad de sus ganancias.

El botín: Una bolsa histórica

El enfrentamiento, que mezcló el boxeo de élite con el fenómeno de las redes sociales, generó una bolsa estimada de 184 millones de dólares. Bajo un acuerdo de reparto equitativo, Joshua se adjudicó aproximadamente 93 millones de dólares. Sin embargo, esta cifra fue solo el punto de partida antes de enfrentarse a los fiscos de dos países.

El "Knockout" financiero: ¿A dónde se fue el dinero?

Debido a las leyes fiscales internacionales, el ex campeón mundial de los pesos pesados debió tributar en dos frentes:

En total, Joshua conservará apenas el 53% de su premio original, viendo cómo más de 43 millones de dólares se desvanecieron en obligaciones legales.

    "Desde que entré al deporte, me he dado cuenta de lo que es. No soy un YouTuber; ante todo, soy un luchador. Pero siempre ha sido un negocio de dinero, al cien por cien", declaró Joshua tras la pelea.

Negocio vs. Legado

A pesar de las críticas por enfrentar a un rival con menos experiencia como Jake Paul, a quien terminó fracturándole la mandíbula, Joshua defendió su postura. Para el británico, el boxeo moderno exige inteligencia financiera: "Hay que tener las reglas del juego en orden, ganar dinero y salir del ring con la cabeza y el capital intactos".