- #Especiales
- 2025-12-08
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El boxeador australiano Jai Opetaia defendió con éxito sus títulos mundiales de peso crucero de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) y la revista Ring al vencer por nocaut al veterano Huseyin Cinkara en el octavo asalto de un combate realizado en el Gold Coast Convention and Exhibition Centre de Australia. La victoria, sin embargo, terminó opacada por la gravedad de las lesiones sufridas por el retador turco-alemán, que debió ser hospitalizado tras el enfrentamiento.
Durante el inicio de la pelea, Cinkara, de 40 años y residente en Estambul, sorprendió con un derechazo que pareció haber fracturado el hueso orbital de Opetaia poniéndolo en aprietos. Tras recibir golpes contundentes y sufrir un corte debajo del ojo derecho, el campeón australiano reaccionó y respondió con una andanada de potentes ataques en los asaltos posteriores.
El combate alcanzó su desenlace en el octavo asalto. Un gancho de izquierda de Opetaia atravesó la guardia de Cinkara y lo lanzó contra las cuerdas, luego a la lona, donde permaneció inconsciente durante varios minutos. El personal médico del evento acudió de inmediato y, después de ser atendido, Cinkara logró ponerse de pie apoyado por su equipo.
La preocupación por el estado de salud del boxeador fue inmediata. Tras la evaluación inicial, el púgil turco-alemán fue trasladado en ambulancia a un hospital local para someterse a estudios más avanzados. Los exámenes médicos detectaron una contusión cerebral con una pequeña hemorragia y una fractura leve en la vértebra C1, un hueso que conecta el cráneo con la columna vertebral y es clave para la estabilidad del cuello.
De acuerdo con los reportes de medios especializados como Boxing News y Boxing Scene, las lesiones no requirieron cirugía, pero los especialistas indicaron al menos dos días de seguimiento hospitalario y una cuidadosa monitorización neurológica para descartar complicaciones adicionales.
Opetaia, acumula un registro invicto de 29 triunfos y 23 nocauts. A pesar de su victoria, el boxeador australiano insistió en la autocrítica. “Siento que entrené duro, pero mi cuerpo, mis piernas estaban destrozadas, para ser honesto. Es un buen aprendizaje. No debería recibir tantos golpes de alguien así. Debería haber boxeado mucho mejor, haberme movido con más fluidez, haber estado alerta durante más tiempo”, explicó.