Al igual que Kaliman, el exjefe policial fue puesto contra la pared por sus coroneles
08/12/2019 - 09:22:12
P�gina Siete.- El apego desmedido de algunos jefes policiales hacia Evo Morales y el dep�sito del denominado �bono lealtad�, en plena crisis social de noviembre, fueron los detonantes que provocaron que los coroneles de la Polic�a arrinconen a su comandante general, Vladimir Calder�n, y exijan su renuncia.
En entrevista con P�gina Siete, durante el conflicto, Calder�n asegur� que estaba al lado de la Constituci�n Pol�tica del Estado (CPE) y que se deb�a a sus polic�as, pero sus actos y sus subalternos mostraron lo contrario.
�General Calder�n, por una instituci�n digna, tome buenas decisiones. Si usted no quiere apoyar a la sociedad, deje que la tropa apoye a su pueblo�, le escribieron los oficiales y polic�as de base el 6 de noviembre. Dos d�as despu�s se amotinaron, lo desconocieron y se unieron a la poblaci�n en todo el pa�s.
Despu�s de las elecciones generales del 20 de octubre, c�vicos, vecinos, estudiantes, m�dicos y otros sectores se volcaron a las calles a bloquear en contra de la continuidad de Morales.
Durante esos d�as, hasta el 9 de noviembre, la Polic�a reprimi� las manifestaciones, lo que caus� el repudio de la gente.
Los gases lacrim�genos ya se terminaban y el cansancio, despu�s de turnos de m�s de 24 horas, ya se comenzaba a sentir en las filas policiales. Frente a ellos, mineros hac�an explotar dinamita muy cerca y los civiles no se cansaban de lanzarles piedras. La molestia ya era evidente.
Uno de los �ltimos d�as de octubre, Calder�n convoc� a una reuni�n con su Estado Mayor, es decir, con los 24 directores nacionales. El jefe policial terminaba de llegar del nuevo Palacio para anunciarles que se hab�a conseguido el pago de 3.000 bolivianos para cada efectivo y que movimientos sociales y universitarios afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) llegar�an �para hacer frente a la oposici�n�.
�Le reclamamos por qu� cuando las cosas estaban ardiendo en el pa�s ten�amos que recibir ese bono, cuando pedimos nivelaci�n salarial durante 13 a�os. Adem�s, no pod�amos aceptar que grupos masistas lleguen, iban a ocasionar m�s enfrentamiento y nosotros est�bamos al medio; el general se molest�, cont� un coronel que estuvo en esa reuni�n.
Coroneles del Estado Mayor de la Polic�a hablaron con P�gina Siete sobre los d�as en que Calder�n les mostr� su lealtad al gobierno de Morales, que, de a poco, se ca�a. Este medio llam� al exjefe policial, pero no respondi� las llamadas.
En una segunda reuni�n entre el comandante y su Estado Mayor, los coroneles le avisaron que la capacidad de los carros antidisturbios hab�a sido rebasada y que necesitaban mayor apoyo. M�s tarde, un Neptuno de la Polic�a Militar lleg� al centro de La Paz para lanzar agua a los manifestantes. El general Jhonny Coronel, entonces subcomandante de la Polic�a, se enoj� con sus subalternos cuando �stos pidieron que se llame a los militares.
El 8 de noviembre, Calder�n convoc� a su Estado Mayor de urgencia, los coroneles pensaron que se iba a tratar la situaci�n de los efectivos, pero no. �Ese d�a sali� en conferencia de prensa, ley� una carta para que las partes del conflicto depongan sus actitudes violentas; despu�s, no hubo reuni�n�, cont� otro coronel.
El Estado Mayor se enter� despu�s de que esa conferencia fue coordinada con el entonces ministro Carlos Romero, por lo que la relaci�n con el comandante se quebr�.
En una carta, el representante del Consejo de Vivienda Policial (Covipol), Johnny Tapia, enviada el mismo d�a, le expresa su molestia por c�mo Calder�n manejaba a los polic�as: �Se�or comandante, de acuerdo a la informaci�n presentada por miembros del Estado Mayor, tiene la obligaci�n de comunicarle al Presidente esta sensible informaci�n sobre la realidad de los conflictos (�). Esta vez es totalmente diferente porque nos volvemos a encontrar al centro del conflicto, pero con la diferencia de que en uno de los lados est� gran parte de la sociedad y en la otra los seguidores del partido oficialista�.
Los coroneles de la Promoci�n 88, quienes ahora ocupan la c�pula policial, se reunieron con Calder�n el s�bado 9 de noviembre y le pidieron que renuncie. ��l acept� verbalmente, pero nunca lo materializ�. Segu�a ganando tiempo, no quer�a irse y tampoco ped�a ayuda a los militares�, se�al� otro oficial.
Un d�a despu�s, el domingo 10 de noviembre, Morales present� su renuncia a la Presidencia; Calder�n no ten�a ante qui�n presentar su dimisi�n y se empe�aba en seguir al mando. Durante esa tarde y la ma�ana del lunes 11, grupos vand�licos atacaron decenas de estaciones policiales, quemaron 66 buses PumaKatari y casas de autoridades; la Polic�a hab�a sido rebasada.
Hasta esa fecha, los comandantes departamentales de Cochabamba, Ra�l Grandy, y de Santa Cruz, Igor Echegaray, hab�an renunciado por presi�n de sus subalternos, al ser considerados aliados del MAS.
El que se arm� de coraje fue el comandante departamental de La Paz, Antonio Barrenechea. Ese lunes, en la plaza Murillo, y con su uniforme antidisturbios, se dirigi� al que era comandante militar, Williams Kaliman. �Mi general, le solicito que intervenga porque la Polic�a ha sido rebasada. No podemos permitir muertes y sangre. Hemos estado 21 d�as sosteniendo esto�, dijo.
M�s tarde, las tropas militares salieron a las calles. Calder�n lleg� al Estado Mayor a pedir, ya tarde, que el Ej�rcito intervenga e hizo oficial su renuncia. Fue la �ltima vez que se lo vio.