La crisis se hospeda en el turismo venezolano sin fecha de salida
08/11/2019 - 14:47:23
VOA.- Tres mujeres de edad madura juegan domin� bajo el arco elevado de la tarima central de la Plaza La Rep�blica de Maracaibo, Venezuela.
Baten sus piezas y las colocan de golpe, por turnos, sobre una tabla de madera desgastada cerca de las 5:00 de la tarde, mientras hablan de sus amigos, de la familia, de la crisis del pa�s y de an�cdotas recientes.
Dos parejas de enamorados retozan en unas bancas, a lo lejos. Un obelisco se erige a unos metros dentro de una fuente de agua, en medio del lugar, considerado uno de los sitios de disfrute emblem�ticos de la ciudad.
La plaza est� a punto de coparse de gente, adelanta Yosmaira, una de las jugadoras, de cabello casta�o corto y pintado con mechas amarillas.
La municipalidad adorn� el lugar con decoraciones y luces navide�as, atrayendo a decenas de personas. El atractivo decembrino y el esparcimiento nocturno, no obstante, tienen apenas d�as.
�Se pone full (lleno) por la iluminaci�n que hay, pero antes, ya a las 8:00 de la noche, esto estaba pelao� (desierto)�, a�ade la mujer, quien vive a unas cuadras de la plaza.
Aura Zayago, de 77 a�os, la m�s anciana de la cruz de tres, muestra un �nimo agridulce cuando se le pregunta del potencial tur�stico de su ciudad.
�Le agradezco mucho a Maracaibo. Siempre hablo bien de ella, pero tengo que decir la verdad�, desliza, con su cara cubierta bajo una gorra que la protege del sol picante de esta tarde.
Diana y Yosmaira, sus compa�eras, detienen el juego para escuchar con atenci�n a Aura despotricar de la ciudad a donde se mud� hace 49 a�os desde Capacho, T�chira, para estudiar Enfermer�a y Educaci�n.
�Por donde mires t�, hay basura, no hay agua, no hay gas, no hay transporte. Entonces, la ciudad no est� apta para el turismo, sino para nosotros, que nos calamos eso�, refunfu�a con acento andino.
Maracaibo, capital del estado m�s poblado de Venezuela, Zulia, y catalogada como la ciudad petrolera del pa�s, era un im�n de turistas.
Hace 12 a�os, fue sede de cinco juegos de la Copa Am�rica de f�tbol, incluida la final entre la Argentina de Leo Messi y la Brasil de Dani Alves.
Sus calendarios inclu�an fechas de conciertos de artistas de la talla de Shakira, Ricky Martin, The Backstreet Boys, Luis Miguel y Marc Anthony.
Era urbe de convenciones petroleras. Hab�a foros educativos por doquier y simposios de medicina con m�xima frecuencia.
La hoteler�a, el transporte privado, el flujo de vuelos entrantes y salientes y la afluencia de comensales en restaurantes eran negocios din�micos, vivos.
La gaita, g�nero musical aut�ctono, la llam� �la ciudad m�s bella que existe en el continente�, engalanada por �la gente de m�s alta calidad�, el lago m�s grande de Am�rica Latina y el segundo puente m�s extenso de Suram�rica.
Esa sinergia de encanto es cada vez m�s una postal del pasado.
Liliana Polanco, comerciante colombiana de 45 a�os, ya no ve el atractivo citadino que la hipnotiz� hace 10 a�os en sus primeros viajes a Venezuela.
�Daba gusto venir antes. En este momento, no me parece que el pa�s est� apto para el turismo debido a la baja calidad de vida�, dice, detenida frente a la Bas�lica de �La Chinita�, una meca del devocionario cat�lico venezolano que el turista dom�stico y extranjero suele frecuentar en Maracaibo.
Maracaibo, como las grandes ciudades de Venezuela, est� imbuida en una crisis integral. El nivel de pobreza en el pa�s es de 48 por ciento, seg�n la �ltima Encuesta Nacional de Condiciones de Vida.
La inflaci�n de precios entre octubre de 2018 y septiembre de 2019 fue de 50.100,3 por ciento, indic� el Parlamento venezolano, mientras el salario m�nimo mensual es de 150.000 bol�vares o 6,6 d�lares al cambio oficial.
La decadencia de la econom�a nacional ha lapidado el turismo en Venezuela, eval�an dirigentes empresariales.
La ocupaci�n en los 27 hoteles de la ciudad es de apenas 11 por ciento, precisa Jos� Chamy, presidente encargado de la C�mara Hotelera local.
Los est�ndares hoteleros consideran financieramente saludable que ese promedio est� entre 35 y 40 por ciento, indica el vocero.
El torneo futbol�stico de 2007 y los conciertos de artistas internacionales hasta 2013 valieron a la ciudad picos en el alquiler de habitaciones de entre 85 y casi 100 por ciento, seg�n Chamy.
Leudo Gonz�lez, presidente del Consejo Superior de Turismo de Venezuela, dijo en octubre que la ocupaci�n hotelera nacional era de 25 por ciento.
El indicador se elev� moderadamente en las �ltimas semanas hasta 36 por ciento, de acuerdo con Chamy, lo que ubica al Zulia en el s�tano del ranquin de la hoteler�a y, por ende, del turismo en el pa�s.
La crisis tambi�n se hospeda en los hoteles. Muchos, admite Ricardo Acosta, presidente de la Federaci�n de C�maras del Zulia, han clausurado la mayor�a de sus habitaciones al no poder costear sus mantenimientos.
El hotel de una de las avenidas principales del norte de la ciudad tiene hoy cinco de sus 10 pisos cerrados, ejemplific�.
Las fallas de los servicios p�blicos, as� como la escasez de la gasolina, la inseguridad y el mal funcionamiento de las telecomunicaciones, favorecen el resbal�n tur�stico en Venezuela, coinciden empresarios y habitantes.
Y, particularmente en Zulia, el racionamiento el�ctrico ha sido la �ltima herida abierta del turismo. Maracaibo y otros 20 poblados experimentan cortes de luz de 12 horas al d�a desde hace siete meses.
�Es lo que m�s ha perjudicado�, afirma con vehemencia el vocero de la C�mara Hotelera. A�n as�, los patronos conf�an en la resurrecci�n.
Las autoridades promueven retoques en plazas y actividades culturales en las v�speras de la Feria de la Virgen de �La Chinita� como quien ondea una bandera de invitaci�n desde una isla desierta.
�Convocamos a todo el pueblo maracaibero, zuliano y venezolano a que se vengan pa� Maracaibo a disfrutar de la buena feria de �La Chinita��, declar� el alcalde Willy Casanova, simpatizante del presidente en disputa Nicol�s Maduro, tras un modesto desfile de 30 comparsas en el centro de la ciudad.
La oferta no convence a Reina Sulbar�n, residente de Maracaibo.
�La ciudad era m�s bonita. Todo est� muy olvidado. Y, ahora, �c�mo se moviliza uno con estos sueldos?�, se pregunta, poco antes de desalentar a una sexagenaria que mendiga a las afueras de la bas�lica.
La vida comercial que se deriva del turismo es cada vez m�s raqu�tica.
Un restaurante pod�a facturar 120 mesas en una buena noche en Venezuela, dice el due�o de un sitio de comida italiana bajo condici�n de anonimato.
�Ahora, si llegamos a 20 mesas, es mucho�, acota.
Las ventas de boletos a�reos cayeron al menos 60 por ciento en comparaci�n con el a�o pasado, coment� recientemente Nicol�s Furnari, presidente de la Asociaci�n de agencias de Viajes y Turismo.
Es un efecto domin�, como el juego que cada tarde comparten Aura y sus dos amigas bajo el arco de la emblem�tica plaza del norte de Maracaibo.
Ante su mesa de madera, la veterana jugadora corona su queja.
�La ciudad me qued� chica�, dice. �Estoy loca por irme para mi pueblo�, remata.
