- 2010-09-12
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Como si la invasin de la intolerancia fuera poca, o la invasin de la ignorancia hecha gobierno no fuera bastante, ahora resulta que se espera la invasin de los norteamericanos. El seor de Todos los Poderes anuncia ese extremo.
En una confesin poco sincera, pero elocuente de la preocupacin que le invade el Presidente Morales dijo que le tena miedo al narcotrfico. Y sabe bien porque lo dice. La familia Andrade fue una de las que pas por las manos de estos delincuentes. Y quien manda, ordena y protege la sobreproduccin de la hoja de coca, tiene que conocer el alcance del negocio que es la base del narcotrfico.
Para dejar en claro este miedo, el Vicepresidente se apresura a denunciar la amenaza de una posible invasin norteamericana. Con la poca sutil intencin de generar, otro escenario de polmica nacional, tener en vilo a sus movimientos cocaleros y campesinos, y advertirles de que mientras ellos presionan a su gobierno el imperialismo alista una invasin.
Y entre la coca y el miedo nada mejor que buscar al mejor culpable, para cerrar filas. Solo que los cocaleros, que saben, con quin comercializan la coca que producen, se ren por dentro, ante la ocurrencia del seor que verdaderamente gobierna Bolivia. Ellos conocen la dimensin del negocio y la tienen muy clara. Conocen el poder del narcotrfico.
Pero la realidad tiene varias caras. Y una de ellas se llama Brasil. Pas hermano, que es un decir, que viene soportando la invasin de la cocana, gracias al territorio libre para la produccin de la hoja de coca (hoja declarada constitucionalmente: patrimonio cultural de los bolivianos) y junto con la droga el creciente comercio de armas que va pari pasu con la violencia en sus ciudades.
As que el seor Vicepresidente debera tener en cuenta esta verdad. Los Estados Unidos no necesitan invadir Bolivia. Lo probable es que el Brasil despus de las elecciones que se avecinan, sea quien le ponga el cascabel al gato. Bolivia es para el Brasil lo que Mxico es para los Estados Unidos. Exportamos droga y le creamos factores de inestabilidad en su seguridad nacional muy importantes.
Estas son las razones que hacen pensar que la comunidad internacional, liderada por el Brasil, comenzar a solicitar que Bolivia ponga ms atencin a lo que est pasando en su territorio, donde se produce cocana en pueblos originarios y donde la polica no tiene pisada. Lo que significar tener que asumir la alternativa de seguir protegiendo al narcotrfico va sobreproduccin de la hoja de coca y sus derivados o comenzar a reducir la produccin de la hoja de coca en serio con las consecuencias de perder el apoyo de sus bases.
Difcil la tiene, por cierto. Ya que no debemos olvidar que este gobierno tiene una cuna: la coca y un padrino la cocana.