Una mujer de Nueva York sacrificó su propia vida para dar a luz a su hija, informa Mail online.
Elizabeth Joice, de 36 años de edad, tuvo que elegir entre ser madre o continuar el tratamiento del cáncer de pulmón que podría prolongar su vida.
A pesar de los consejos médicos, Joice decidió interrumpir el tratamiento. La niña nació antes de tiempo y por eso Joice pudo pasar un poco de tiempo con ella. Joice falleció 6 semanas después del parto.
Se planean hacer una película documental sobre la vida de Elizabeth Joice con la autorización de su esposo.
RT