Estuvo en Chonchocoro: Violador serial tenía sentencia en 2013 por asesinato pero se benefició con domiciliaria

26/01/2022 - 17:52:33

Richard Choque, el violador serial que dejó conmocionado al país tras conocerse que abusó sexualmente a 77 personas y mató a dos adolescentes en su casa en El Alto, tenía una sentencia ejecutoriada por asesinato en 2013 sin embargo, tras un corto periodo en un régimen penitenciario, se benefició con detención domiciliaria, según una nota de Erbol.

"El señor Richard Choque ha asumido la defensa pública y ellos, ayudándole, han solicitado un cambio a la medida preventiva, le han dado medidas sustitutivas con detención domiciliaria", señaló el lunes 24 de enero el director departamental de Trata y Tráfico de Personas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), Boris Gutiérrez.

"Nosotros ya hemos pedido los antecedentes al Rejap (Registro Judicial de Antecedentes Penales) y nos confirma que tiene una sentencia ejecutoriada por asesinato, porque ya ha existido una víctima que aparte de ser raptada, secuestrada también ha sido enterrada viva. El antecedente es de 2013, motivo por el cual esta persona ha ingresado a la cárcel y el antecedente cursa como asesinato", agregó Gutiérrez, según una cita de Página Siete.

El 29 de noviembre de ese año, Choque fue enviado junto a su cómplice, José C., al penal de máxima seguridad de Chonchocoro acusados por el secuestro y asesinato de una joven universitaria de 20 años, según detalla una nota de la red Erbol.

En aquella oportunidad, la Policía encontró tres cédulas de identidad de mujeres jóvenes en la residencia de Choque, además de prendas íntimas.

Al igual que en sus recientes hechos delictivos, Choque captaba a sus víctimas a través de las redes sociales y utilizando perfiles falsos.

Tras la detención de Richard C. F. de 32 años, calificado de “psicópata sexual” y acusado de trata y doble feminicidio, la Policía informó que se encuentra en tareas de buscar a más víctimas y que incluso la investigación llegará a otros departamentos donde habría recorrido el sujeto.

La información fue proporcionada a Erbol por el teniente Boris Gutiérrez, jefe de la División Trata, quien indicó que el acusado no sólo recorría La Paz y El Alto, sino también estaba en Santa Cruz, Cochabamba y la región de los Yungas.

Invitó a la población a denunciar hechos de trata y tráfico que podrían involucrar al sujeto, cuyo perfil psicológico es de “psicópata sexual desalmado”.

“Les pido que se acerquen, que me llamen que pasen por cualquier unidad de trata y tráfico de personas, para poder tener mayores elementos de convicción y poder encontrar mayores víctimas”, dijo Gutiérrez.

Recordó que ya se han identificado al menos 77 víctimas y se continúan las investigaciones, mediante patrullaje cibernético y estudio de los dispositivos móviles que se han secuestrado producto de los allanamientos.

El teniente Gutiérrez dijo que también se está interoperando información de todas aquellas personas que han denunciado la desaparición de una persona y verificar si se registró el mismo modus operandi, como ocurrió con las dos adolescentes asesinadas.

Recordó que en el caso de las dos adolescentes, cuyos cuerpos fueron encontrados en casa de Richard, se pedía a las familias de las jóvenes dinero a cambio de su libertad.

Acotó que el acusado es un “depredador sexual” que no distingue género ni edad para tener relaciones.

El oficial anunció también que se realizarán más allanamientos, con la participación de criminólogos, psicólogos forenses y canes, como ocurrió en la vivienda de la zona Ballivián donde se encontró los dos cadáveres.

Sin dar mayores detalles, el teniente señaló que los allanamientos se realizarán en La Paz, pero también paralelamente en otros departamentos.

Richard ya tiene antecedentes de asesinato con sentencia correspondiente a 2013, pero estaba con detención domiciliaria.

En las investigaciones se recientes, se descubrió que fingía ser policía para abusar y extorsionar a mujeres a las cuales ofrecía trabajo sexual. En el marco de ese caso, se evidenció que en su casa tenía enterrados los cuerpos de dos de sus víctimas.