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Cierre de negocios y despidos: La otra cara del segundo aguinaldo




13/10/2019 - 20:24:32
El Deber.- �rase una vez un negocio pr�spero. Hace m�s de 15 a�os, Ra�l Garc�a, ten�a un taller textil exitoso: 30 empleados, maquinaria y muchos pedidos. Sus prendas de dise�os exclusivos, y dibujados a mano, recorr�an diferentes puntos geogr�ficos del pa�s. Incluso lleg� a vender mercader�a en zonas fronterizas con Per� y Argentina, donde habitantes de esas naciones compraban sus camisas y pantalones �Made in Bolivia�.

Toda iba bien, pero la internaci�n de ropa de contrabando y la aparici�n de prendas chinas inundaron el mercado e hicieron que su producci�n caiga. Aun as�, continu� batallando, se ajust� y redujo su planilla a 15 trabajadores. Sin embargo, el golpe de gracias lo recibi� hace cinco a�os, cuando el Gobierno decret� el pago del doble aguinaldo.

Trat� de seguir a flote, pero desde hace dos a�os decidi� cerrar las puertas de su negocio. �Fue el golpe m�s duro. Ellos (sus trabajadores) entendieron que no pod�a pagarles y se fueron�, dice Garc�a, que extra�a las jornadas laborales donde el sonido de las tejedoras autom�ticas se mezclaba con el ritmo de cumbia que sus empleados escuchaban en la faena.

El pago del segundo aguinaldo, denominado �Esfuerzo por Bolivia�, se instituy� el 20 de noviembre de 2013 mediante el Decreto Supremo N.� 1802. �Hemos decidido que mientras la econom�a siga creciendo por encima del 4,5%, nuestros trabajadores del sector p�blico y privado tendr�n doble aguinaldo�, fue la condicionante que puso el presidente Evo Morales, al anunciar el beneficio.

Y fue as� que, entre 2013 y 2015, la tasa de crecimiento rebas� el tope exigido por el Gobierno.

Juan Carlos Vargas, presidente de la Federaci�n Departamental de la Micro y Peque�a Empresa (Fedemype) dio un dato crudo: la medida influy� en el cierre de 15.000 negocios a escala nacional, desde que est� vigente.

El beneficio no se pag� en 2016 y 2017 porque los indicadores bajaron, pero nuevamente subieron en 2018. Este �ltimo a�o, Ra�l Garc�a, a�n daba batalla contratando espor�dicamente a alg�n sastre. Con el �ltimo hombre que tuvo en planilla negoci� el pago del beneficio con prendas.

Don Ra�l, como lo llaman en su barrio, Villa F�tima, cambi� de actividad: compra y vende ropa. Pero conserva intacto su taller.

Cada ma�ana limpia y echa aceite a sus 40 m�quinas, valuadas entre $us 1.500 y $us 5.000 cada una, que en otrora cortaban y daban forma a camisas, blusas, faldas, blue jeans, y todo tipo de prenda que le solicitaban. Hac�an de todo.

�Las m�quinas no me piden comida, ni sueldo, nada. Solo debo estar pendiente de que no se oxiden. Las limpio con aceite para que no se freguen�, se�ala.

�No pod�a dar lo que no ten�a�

Rolando Zabala, 35 a�os, no pudo aguantar al igual que don Ra�l. Hace seis a�os ten�a un negocio dedicado a dar servicios de inform�tica con soporte t�cnico e implementando sistemas. En planilla ten�a ocho trabajadores, que le significaban un gasto de Bs 23.500 mensuales. Al dictarse el decreto para pagar el beneficio y analizar su balance de ingresos y egresos, vio que las cuentas no cuadraban, decidi� tirar la toalla: cerr�.

�No pod�a pagar lo que no ten�a, tuve que liquidarlos a todos y cerr�, cuenta el hombre, que abon� cuanto beneficio social pudo para poner fin a su negocio.

Netbol, su empresa, tuvo apenas tres a�os de vida. Ahora el emprendedor, se pas� al bando de los dependientes. Usa un uniforme de una empresa y cumple un horario de oficina: como lo hac�an sus empleados.

En estos momentos volver a emprender es un riesgo para �l.

El cr�dito que sac�, para arrancar con su empresa, reci�n lo termin� de pagar hace a�o y medio. Por ahora prefiere la seguridad de un trabajo estable, hasta que existan mejores condiciones.

Carpinter�as sin carpinteros

Wilford Ojeda es un maestro carpintero. Divide su tiempo para estar en dos lugares. La mitad del d�a lo destina para trabajar en solitario en su taller ubicado en la Villa Primero del Mayo.

La otra mitad, comercializa sus muebles en el mercado Miraflores, en donde gestion�, en su calidad de presidente de la Asociaci�n de Carpinteros del Roble, un espacio para que sus agremiados vendan su producto directamente a la gente.

Ah� el aroma del thinner, y de la madera reci�n pulida, se mezcla con el pescado a la parrilla que se vende al costado del galp�n que ocupa en el centro de abasto. La idea surgi� para poder competir en precios con los muebles importados que han inundado el mercado. Pero tambi�n para sostener la �nica fuente de ingresos de los talleres afiliados de esta asociaci�n, golpeados por este fen�meno y el doble beneficio.

�Eso (por el doble aguinaldo) nos mat�, sentencia Ojeada. Luego agrega que varios de sus afiliados tuvieron problemas con sus empleados porque no pod�an pagar.

Esto llev� a que, de 90 talleres afiliados, solo queden 50 activos.

En todo Santa Cruz, seg�n Ojeda, -que adem�s ocupa la secretar�a general de la Confederaci�n Nacional de Carpinteros, Ebanistas y Artesanos en madera de Bolivia (Conceambol)- hasta antes de que se decrete el pago del beneficio operaban 7.000 carpinter�as, pero ahora solo quedan en pie 3.500 negocios.

�l mismo redujo su taller. Antes daba trabajo a seis personas, ahora solo emplea a un ayudante eventual o es apoyado por un familiar.

�Nos han dejado sin capital. Un compa�ero que ten�a 16 trabajadores, ahora tiene cuatro. Por eso muchos prefieren cerrar�, dijo.

No es el �nico en esta situaci�n. Felipe Choque, que desde hace una d�cada ejerce este oficio, tuvo que achicarse. Hace tres a�os, ten�a tres operarios. Ahora, al igual que Ojeda, pule, corta y da forma a la madera solo.

�El primer a�o pagamos de a poco o entregaba muebles que vendan. Ahora estoy solo�, dijo.

En promedio en Miraflores, Choque y Ojeda, venden hasta cinco muebles: una comodita, un mueble chico, mesas, o un ropero. Todo sirve para ellos.

Billetera M�vil, alivio de pocos

�dgar Lora, presidente de la Asociaci�n de Confeccionistas Textiles de Santa Cruz, da un diagn�stico similar a la de los otros microempresarios. Pero, reconoci� que lo ��nico bueno que pudo hacer el Gobierno en 13 a�os, fue implementar la Billetera M�vil�.

El textilero explic� que a escala nacional unas 5.000 empresas se favorecieron con este mecanismo, que permite que los beneficiarios del doble aguinaldo usen el 15% en compras de productos nacionales.

El uso de este porcentaje fue establecido el a�o pasado por el Gobierno, luego de varias negociaciones con el sector de la micro, peque�a y mediana empresa.

Para acceder al programa, el Ministerio de Planificaci�n hizo un registro f�sico y virtual. �Pero pocos se han beneficiado, hay desconfianza�, afirma Lora.

�Yo hab�a cerrado, volv� a producir por la billetera m�vil, pero ya no es como antes, cuando llegu� a tener 20 empleados�, dice.

Cainco lo ve inviable en 2019

Para esta nota se busc� la versi�n del Gobierno y se consult� al Ministerio de Econom�a. En esa cartera de Estado indicaron que no pod�an responder porque �ese tema lo ve el Ministerio de Planificaci�n�.

Se consult� al despacho de ese ministerio y se excusaron.

Pero en anteriores ocasiones, el Gobierno asumi� una defensa f�rrea de la medida.

En 2018 el �ltimo a�o que se pag� el bono, el Ministerio de Econom�a en una separata titulada El Segundo Aguinaldo, dinamizar� la econom�a, justific� el beneficio indicando que desde 2006 la tasa de crecimiento del pa�s obtuvo cifras positivas.

�El doble aguinaldo genera efectos positivos, los trabajadores tienen mayor posibilidad de consumo y eso se traduce en mayor actividad de las empresas�, apunta la publicaci�n.

Incluso se�ala que, seg�n datos de Fundaempresa, el n�mero de compa��as se increment� en los a�os cuando se pag� el beneficio (de 217.164 en 2013 a 272.249 en 2015, y 311.271 en 2018).

No obstante, el expresidente de Fundempresa, Rolando Schrupp, explic� que en el an�lisis de estas cifras hay que concentrarse en las sociedades an�nimas y las de responsabilidad limitada, porque el resto son fuentes de autoempleo (unipersonales), pero que representan un 80% del total y no generan empleos. �El doble aguinaldo es un infierno para los emprendedores�, dijo.

En esa l�nea, explic� que incluso ahora existen cerca de 90.000 compa��as que tienen problemas con el Servicios de Impuestos.

Desde la C�mara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), explicaron que la norma que fija el pago del beneficio no toma en cuenta la situaci�n sectorial e individual de las empresas.

�El PIB es un agregado que incluye a grupos que podr�an estar en dificultades�, dijo la entidad.

Por otro lado, seg�n Cainco, la medida afecta el flujo de caja de las empresas, porque implica pagar cuatro salarios en menos de 40 d�as, �lo cual se constituye en una carga importante para firmas cuyas operaciones requieren continuo capital de trabajo�.

Analizando la situaci�n, seg�n la organizaci�n empresarial, para este a�o es inviable el pago del doble beneficio.

El tiempo pas� y don Ra�l, repite su rutina ma�anera: abre su taller y limpia sus m�quinas, saca algunas telas para no perder su destreza, hace algunas camisas. Es optimista: �espero abrir otra vez�, afirma.

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