Jueves 28 de marzo 2024 Contacto

El venezolano apela a la caridad para alimentar a sus coterráneos




01/10/2019 - 17:21:28
VOA.- Es su primera comida abundante en las �ltimas 24 horas. Aun as�, Yeisiany, una ni�a venezolana de siete a�os, se toma unos segundos para persignarse con el signo cristiano de la cruz ante el plato de pasta con queso que est� a punto de ingerir a las 10:47 de la ma�ana en el comedor �Mam� Delia�, en el barrio Teotiste de Gallego, Maracaibo, al occidente de Venezuela.

Menuda, extiende sus manos al frente, al nivel de su cabeza. Y ora velozmente.

�Se�or, te damos las gracias por estos alimentos. Bendice las manos de quienes los hicieron. Am�n�. Sin m�s, embiste la comida con una cuchara, entre 10 ni�os sentados en un par de mesas tama�o infantil.

�Est� buena�, comparte la peque�a un par de minutos luego, ya satisfecha, mientras bebe el batido de cereal con que acompa�a el men� del d�a.

Es habitual que los ni�os del barrio tengan tanto apetito que desde las 10:00 de la ma�ana -a veces antes- esperan a las afueras del sitio ansiando sus turnos.

Teotiste de Gallegos es considerada una de las vecindades m�s empobrecidas e inseguras de Maracaibo, la capital del estado m�s poblado de Venezuela, Zulia, con 3.7 millones de habitantes, y rico en reservas de petr�leo.

Entre sus calles de asfaltos desgastados y sus viviendas modestas, sus residentes padecen m�ltiples necesidades: falta de agua, electricidad, gas dom�stico, dinero. Y, puntualmente, sufren hambre.

�Muchos no tienen nada que comer en sus casas�, lamenta Tibisay P�rez, la cocinera jefa del �Mam� Delia�, antes de servir cinco platos adicionales para un grupo de peque�os que acaba de ingresar al comedor.

La Fraternidad Mercedaria Seglar, una asociaci�n civil conocida como Framerse, fundada en 1990 en la parroquia San Ram�n Nonato de Maracaibo, administra este y otros tres comedores que benefician a cerca de 1.000 ni�os.

Solo en el �Mam� Delia�, alimentar�n hoy a 65 censados. La cifra se quintuplica en temporada escolar �el lugar tambi�n opera como centro de educaci�n inicial.

Colectas mensuales en la iglesia, as� como donativos de particulares y empresas, entre ellas Nestl� y Polar, les permiten alimentar a los ni�os de cuatro barrios del noroeste de la ciudad: Reyes Magos, La Lucha, El Valle y Teotiste de Gallegos.

Tambi�n gestionan un centro de ayuda para ancianos y un servicio m�dico a precios solidarios. Decenas de voluntarios y feligreses son los motores.

Nixia Navea, una venezolana de 59 a�os cuyos nietos visitan a diario el comedor, reivindica la urgencia de solidaridades como esa, que muchos en Venezuela han comenzado a llamar �la verdadera ayuda humanitaria�.

Dice no tener ingresos sino para comprar cuatro kilos de comida al mes para su familia. �Mis muchachos se marean y se desmayan por el hambre�, expresa, alarmada.

Hambre en Venezuela, alerta internacional

La crisis �est� arras�ndolo todo� en Venezuela, seg�n las palabras en julio de Michelle Bachelet, Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas.

Su reporte de la situaci�n en el pa�s incluy� un cap�tulo especial sobre la alimentaci�n de los venezolanos.

�La escasez creciente de alimentos y su precio cada vez m�s alto se han traducido en un n�mero menor de comidas con menos valor nutricional, elevados �ndices de desnutrici�n�, apunt�.

Nicol�s Maduro, presidente en disputa, atribuye las dificultades de alimentaci�n de los venezolanos y las complicaciones de sus planes de asistencia social a lo que llama �la guerra econ�mica�.

Tambi�n culpa al �bloqueo infernal� que se deriva, a su juicio, de las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Uni�n Europea a miembros e instituciones de su administraci�n. Su gobierno tild� el informe de Bachelet de �err�tico�.

La Alta Comisionada alert� que el salario m�nimo en Venezuela, de 40.000 bol�vares o 1.85 d�lares, no puede considerarse como un salario de subsistencia, al precisar que cubre �nicamente 4,7 por ciento de la canasta b�sica de alimentos.

Venezuela se encuentra entre los 41 pa�ses del mundo con necesidad alimentaria, seg�n indic� en septiembre la Organizaci�n de las Naciones Unidas para la Alimentaci�n y la Agricultura (FAO, por sus siglas en ingl�s).

Seg�n el informe Perspectivas de cosechas y situaci�n alimentaria presentado por la FAO, �la hiperinflaci�n ha erosionado gravemente el poder adquisitivo local en Venezuela, generando graves limitaciones al acceso de los hogares a los alimentos�.

El organismo hab�a advertido un mes antes que 6,8 millones de venezolanos se quedan sin alimentos, experimentan hambre y, en situaciones extremas, pasan d�as sin comer.

Buscar manos solidarias

La Oficina para la Coordinaci�n de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas, OCHA por sus siglas en ingl�s, solicit� a sus pa�ses donantes un fondo de 223 millones de d�lares para �mitigar el impacto de la crisis� gracias a un plan de respuesta humanitaria que beneficiar�a a 2.6 millones de venezolanos.

Esa cruzada camina con patas cortas. La recaudaci�n se estanc� lejos de la meta. Se ha recolectado solo nueve por ciento de lo estimado, declar� Sami Elhawary, directivo de la OCHA, a la Asociaci�n de Prensa Extranjera en Venezuela.

�Esto preocupa mucho�, dijo a periodistas en septiembre.

La asistencia humanitaria dom�stica ha llenado, entonces, el vac�o de la insuficiencia y la inefectividad de la extranjera: iglesias de diversos credos, instituciones y grupos espont�neos de ciudadanos han invertido recursos y tiempos en el prop�sito de alimentar a cuanto venezolano necesitado puedan.

En Maracaibo, pueden verse filas de centenares de adultos y ni�os en iglesias como la del Padre Claret, que asiste a cerca de 1.000 personas cada mi�rcoles, el Hogar Cl�nico San Rafael o el colegio Carmela Valera, en el norte de la ciudad.

Los venezolanos conocen este tipo de ayudas como ollas solidarias o comunitarias. Nacen por igual de agrupaciones de probada data, como C�ritas Venezuela e instituciones religiosas, y de espont�neos que procuran alimentar peri�dicamente al necesitado con quien se topen en las calles.

Los beneficiados peregrinan para llegar a ellas.

Jos� Trinidad Molero, un indigente de 63 a�os que perdi� la visi�n de un ojo en un accidente de tr�nsito cuando era joven, transita a diario m�ltiples kil�metros buscando esas alternativas para comer al menos una vez al d�a.

�Caminamos muchas cuadras para buscar estas comidas gratis�, dice, ya de salida de una l�nea de unos 30 ancianos a las afueras del colegio hogar Carmela Valera.

All�, cinco monjas de la comunidad cat�lica de los Agustinos Recoletos regalan platos de comida a 200 personas cada mediod�a, de lunes a viernes.

Esa asistencia comenz� hace dos a�os al notar el impacto de la crisis en el m�s empobrecido, explica. Los recursos nacen de donaciones de particulares y de fondos de la Asociaci�n Venezolana de Escuelas Cat�licas, la AVEC.

Wendy Khalil, monja de 38 a�os, coordina en una puerta lateral del colegio la entrega del men� del d�a: sopa con vegetales varios, repartida en dos ollas gigantes que reposan en una mesa de madera. Dos voluntarios le ayudan.

�Hay gente que llega casi desmay�ndose. Se les bajan los niveles de tensi�n arterial o de az�car en la sangre. Muchos lloran porque no tiene qu� comer�, indica, afligida la religiosa.

Decenas llevan sus propios recipientes o envases de pl�stico, que generalmente son viejos potes de mantequilla o bebidas. Algunos guardan sus comidas para m�s tarde. Otros la ingieren de inmediato, como Molero.

A su lado, Jos� Amaya, un ex trabajador de la construcci�n de 75 a�os, devora su plato en tres extensos sorbos. La noche anterior, se acost� sin cenar, admite.

No tendr�a nada que comer si no fuera por la mano amiga de gente como las religiosas del Carmela Valera, cuenta.

Ya pleno, al menos por unas horas, hace votos porque se multipliquen. �No existi�ramos sin ellos�, dice.

Estimados lectores: recuerden que estas noticias las pueden encontrar en nuestro Canal de Whastapp al momento de su publicación.

Sigue el canal de Hoybolivia.com en WhatsApp:
whatsapp.com/channel/0029Va8B7PQ3GJOyC41B2Q1a

Noticias Recientes de Venezuela

Copyright © Hoybolivia.com Reservados. 2000- 2024