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En 12 años Evo triplicó su patrimonio y el de García Linera creció 15 veces




15/09/2019 - 09:03:49
P�gina Siete.- No fue casual que el presidente Morales ni bien ascendi� al poder en 2006 se rebaj� el salario. He ah� el meollo de su pol�tica de vistosidad permanente, buscando mostrar una imagen de austeridad que, por supuesto, a estas alturas del �proceso de cambio�, atiborrado de gastos presidenciales, resulta una broma de mal gusto.

Sin embargo, en su momento, su accionar despert� el respeto y la admiraci�n. Tenemos una cantidad enorme de problemas a resolver como pa�s y, sin embargo, un acto tan marginal en t�rminos de dinero �el salario del presidente no sobrepasa el 0,000000000000001% del presupuesto general de la naci�n� resulta tan relevante.

No es pues un tema menor a pesar de su irrelevancia fiscal. Y es que el mensaje es claro: �Yo gano como ustedes, yo soy humilde como ustedes�. No es pues casual tampoco que los tres presidentes del �socialismo del siglo 21� sean los que cobran los menores salarios del continente. En el antepen�ltimo puesto est� Nicol�s Maduro con 4.068 d�lares, en el pen�ltimo puesto est� Evo Morales con 3.327 d�lares y en el �ltimo puesto est� Daniel Ortega con 3.200 d�lares.

Precisamente los presidentes que disponen de los bienes del Estado como si fuesen sus propios bienes, usan este tipo de mecanismos para mantener una aureola de humildad y afinidad con los pobres que, a simple vista, parece real. El salario del presidente, por tanto, es un asunto relevante a discutir. Es uno de los ejes de la pol�tica de simbolismos usados a lo largo de 14 a�os.

�Significa ello que los salarios de nuestras autoridades m�ximas no deber�an ser motivo de an�lisis propiamente fiscal/num�rico? No, no deja de ser relevante observar, como lo hizo un excelente informe de El Deber de principios de enero de 2018, que en 12 a�os de gesti�n las deudas de Evo Morales quedaron saneadas y sus activos se elevaron a 2.625.470,34 bolivianos (lo que signific� un incremento del 133%); su patrimonio neto, a 2.625.470 bolivianos (lo que reflej� un incremento del 196%) y sus rentas, a 336.387 bolivianos (lo que represent� un aumento del 38%).

Asimismo, en el caso del vicepresidente Garc�a Linera, despu�s de 12 a�os sus activos, rentas y patrimonio mostraron un alza. Sus activos ascendieron a 1.887.587,44 bolivianos (lo que significa un incremento del 4.190%); su renta, a 276.551,98 bolivianos (lo que muestra un aumento del 106%) y su patrimonio a 718.683,87 bolivianos (un incremento del 1.533%).

Nada despreciable como puede verse. Una triplicaci�n en el patrimonio de Evo y de 15 veces en el de Garc�a Linera. Empero, a pesar de este incremento considerable, son cifras que vistas en su dimensi�n fiscal no ameritan una cr�tica mayor. Es necesario que autoridades de esta catadura tengan la posibilidad de contar con salarios decentes. Por ello, no pasa la reflexi�n por la fijaci�n en el n�mero fr�o. Lo que est� en juego es el malabarismo medi�tico.

Si de algo se precia este gobierno es de haber sacado a miles de bolivianos de la pobreza y haberles permitido gozar de una mayor capacidad de consumo. Esta no es una revoluci�n ind�gena y mucho menos obrera. Es una revoluci�n de las clases medias (si cabe la palabra revoluci�n). Y esas clases medias forman cinturones de lealtad burocr�tica.

La administraci�n p�blica ha visto engrosar sus filas en m�s del 100% pasando de menos de 200 mil funcionarios p�blicos a casi 400 mil. No importa qu� hagan y si son eficientes en sus funciones. Ese es otro cuento.

Lo relevante es que tengan un salario fijo y el enorme privilegio de recibir c�modas cuotas mensuales en un pa�s donde el 70% de la poblaci�n es informal. Ya vimos, por ejemplo, que Bolivia es el pa�s con peores indicadores de eficiencia tributaria o de fomento a la empresa privada. T�cnicamente hablando, el problema podr�a tener una soluci�n r�pida: despidan a cierta gente y hagan m�s eficiente el asunto. No se puede, pues detr�s de cada escritorio hay un bur�crata dispuesto a dar su diezmo a fin de mes y a marchar a cuanta proclamaci�n lo convoquen. El gobierno encuentra en el salario �bajo� del presidente la mejor arma para pedir/exigir ese sacrificio.

Tampoco es de desconocer que la fracci�n pol�tica dominante de este modelo pol�tico es precisamente la burgues�a burocr�tica, que no es sino aquella que lucra a costa del Estado y ha conseguido consolidarse como �due�a� de �ste, privatizando espacios p�blicos del modo m�s grosero e imp�dico. En este caso, el salario �bajo� s�lo oculta esta din�mica mayor de privatizaci�n del Estado.

Finalmente, la pol�tica de la extorsi�n debe funcionar adecuadamente. Es el caso de la empresa privada, obligada a mejorar los salarios de sus empleados por disposici�n del gobierno sin que medie concertaci�n alguna de acuerdo a los par�metros de la Organizaci�n Internacional del Trabajo (OIT). Es bastante predecible que si el presidente ganase 3, 4 o 5 veces m�s de lo que gana no tendr�a �la moral� para pedir/exigir esos incrementos. Mejor permanecer con un salario �bajo�.

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