El Pa�s.es.- El anuncio del fallecimiento del autor de Vivir as� es morir de amor provoc� una oleada de p�sames en las redes sociales, empezando por pol�ticos como Pedro S�nchez o Albert Rivera. Un reconocimiento que al cantante le hubiera gustado tener en vida.

Viv�a solo (sol�a decir que por decisi�n propia) y pr�cticamente olvidado en su chal� de Torrelodones (Madrid), arropado �nicamente por sus recuerdos que desbordan paredes y estanter�as. En Espa�a no consigui� ni el Premio Nacional de M�sica pese a que algunas de sus composiciones pueden ser tarareadas por tres generaciones de espa�oles. Sin embargo, al otro lado del Atl�ntico sigui� siendo hasta este s�bado mismo un �dolo de masas, su m�sica sonaba a diario en las radios y, entre sus seguidores, se encontraba un p�blico muy joven.

Tras 50 a�os de carrera musical, m�s de 40 producciones discogr�ficas, varios discos de platino, cientos de composiciones y m�s de cien millones de discos vendidos en todo el mundo, el m�sico decidi� reinventarse por en�sima vez en noviembre del a�o pasado. Public�, a modo de despedida, un nuevo �lbum, Camilo Sinf�nico, donde repasaba sus grandes y numerosos �xitos (las voces se tomaron de las copias originales) arropado por una orquesta sinf�nica pero no hizo m�s promoci�n que una presentaci�n tan simb�lica como fugaz, en el madrile�o Florida Park. Hab�a perdido pr�cticamente su voz y se mov�a con dificultad.

Cantante, compositor y productor musical, sus obras han cubierto g�neros como la balada, el pop y el rock. Su primer �xito lleg� en 1970 cuando public� el �lbum Algo de m�, que se convirti� inmediatamente en n�mero 1 y desde entonces, no par�. Su gran capacidad creativa se reflej� durante las d�cadas de los setenta y los ochenta, en las que lleg� a publicar un disco al a�o. Esa intensidad creativa estuvo acompa�ada por sus innumerables giras de conciertos centradas en la totalidad de los pa�ses iberoamericanos, pero tambi�n en Estados Unidos (Nueva York, California y Florida) y Jap�n.

Camilo fue un adelantado a su tiempo. Fue precursor en Espa�a de los musicales cuando en 1975 mont� y produjo, a su costa, la �pera rock Jesucristo Superstar, donde interpretaba al propio Jesucristo y contaba en el elenco con �ngela Carrasco como Mar�a Magdalena y con Teddy Bautista como Judas. El musical origin� muchos problemas y fue muy contestado por cat�licos exaltados pero El rey del amor demostr� que su voz pod�a con cualquier registro y que contaba con la simpat�a del p�blico.

El pasado diciembre en su casa, donde guardaba en una vitrina la t�nica y las sandalias de cuero que usaba en la obra, en el curso de una entrevista para EL PA�S Semanal, contaba que gracias a Jesucristo Superstar pudo romper el mito del �Camilito guapo� con el que lo tildaban sus detractores. Tambi�n ha compuesto canciones para otros artistas como Miguel Bos� �en 1976 dos canciones, y produjo y compuso su primer disco�, o David Bustamante.

Su relaci�n con las mujeres fue, cuando menos, extra�a. Apenas se le conocieron idilios. �Han aparecido muchos personajes pero ninguno me hizo cambiar de idea�, dec�a sobre el matrimonio. No hubiera soportado la vida de casado. �As� es como quiero que sea: el escenario y una puerta atr�s con el coche en marcha, y cuando el p�blico todav�a est� pidiendo otra, yo ya estoy en el hotel. Si quiero que haya alguien all�, ya he avisado yo�. Siempre fue un tipo solitario que parec�a tener alergia a las fans enloquecidas.

En 1983 naci� su hijo Camilo M�chel, fruto de una relaci�n con la mexicana Lourdes Ornellas y, tres a�os m�s tarde, escribi� su autobiograf�a al mismo tiempo que decidi� retirarse voluntariamente de los escenarios: "Me voy porque quiero hacerme mayor viendo hacerse mayor a mi hijo" declar�. Volvi� a la m�sica a principios de los noventa pero no consigui� repetir su �xito.

Dotado de voz aguda, perfecta dicci�n y amplia tesitura, sus canciones tratan temas de amor y de desamor, pero tambi�n de felicidad y alegr�a. Maestro de la interpretaci�n, viv�a sus composiciones intensamente con tonos desolados, pero tambi�n esperanzados, alegres y festivos. Durante su carrera se fue adaptando a los nuevos tiempos y fue pasando de las grandes orquestaciones y la utilizaci�n de coros femeninos, a unos ritmos m�s vivos con nuevas instrumentaciones m�s tecnol�gicas.

Poseedor de un repertorio propio abrumador, muy pocas veces ha versionado canciones ajenas. Se ha prodigado en duetos acompa�ado de artistas femeninas como �ngela Carrasco, Lani Hall, Alaska, Isabel Patton, Roc�o D�rcal o Marta S�nchez. En su repertorio figuran temas inolvidables pero su canci�n Vivir as� es morir de amor ha trascendido a tres generaciones y es una de las m�s solicitadas en los karaokes.

Su p�blico es mayoritariamente femenino y se ha mantenido fiel a lo largo de tres generaciones, a pesar de la variedad de g�neros musicales con los que ha tenido que competir a lo largo de su extensa carrera: rock intenso, pop anglosaj�n, m�sica disco, glam, punk, movida, soul, new age, grunge, o las m�sicas del mundo.