Opinión

El Reloj del Apocalipsis

2023-03-07 - 20:11:18
Aterrados, por las explosiones atómicas en Hiroshima y Nagasaki, ocurridas un 6 de agosto de 1945, y luego de percatarse de que sus avances en el desarrollo de la fusión del átomo habían llevado a semejante holocausto nuclear, un grupo de científicos de la Universidad de Chicago, dirigidos por Albert Einstein, crearon dos años más tarde, como un símbolo a ese uso indebido de la ciencia, el Reloj del Juicio Final, o “Reloj del Apocalipsis” (el “Doomsday Clock” en inglés) como una representación gráfica de las amenazas generadas por los propios humanos y que nos acercarían a la destrucción total y catastrófica de la humanidad.

Deseamos traer a colación este tema, por las perenes y pertinaces advertencias que se ciernen sobre nuestro futuro, especialmente en tiempos de guerra, como el generado por la criminal e injusta invasión rusa a Ucrania, sólo motivada por un psicópata que, al ver su vergonzoso e infructuoso fracaso de lograr la ocupación de la capital ucraniana Kiev, al mejor estilo hitleriano, a través de una invasión relámpago o Blitzkrieg que sólo tome tres días, y no un año, como lleva de duración esta siniestra aventura, se ha convertido en un fiasco, ante el cual reacciona como un imbécil, al que sólo le queda el tupé de amenazar con la deflagración de una guerra nuclear.

Ahora bien, como las desgracias no suelen venir solas, con igual concordancia a lo ocurrido entre Rusia y Ucrania, ahora China y Taiwán están en la mira de un posible enfrentamiento, según se colige de las recientes declaraciones del director de la Central de Inteligencia Norteamericana, William Burns y de Mike Gallagher, diputado de la Cámara de Representantes estadounidense, en las que ambos toman en cuenta los incidentes que acaban de suscitarse en dicha región, cuando
las fuerzas armadas de Taiwán han abierto fuego contra drones, supuestamente controlados desde China, poco después de que la presidenta taiwanesa, Tsai Ing Wen, reclamase medidas “contundentes” ante este tipo de incursiones.

Asimismo, previendo un ataque sorpresa, el Gobierno taiwanés ha ordenado el despliegue de tropas, además de barcos y sistema de monitoreo y respuesta rápida. Además, Taiwán ha extendido el servicio militar obligatorio a un año, situado inicialmente en cuatro meses, y ha reforzado su ejército con la compra a EEUU de aviones y armas militares.

Por su parte, Según ha asegurado el ex primer ministro chino, Li Keqiang, al hacer un balance del año, y establecer los objetivos para el 2023. “China luchará decididamente contra la independencia de Taiwán; en pro de la reunificación de la patria; y en contra de la secesión y las intromisiones”, evidenciando que las relaciones entre Taipéi y Pekín han vuelto a desestabilizarse, especialmente después de la visita a la Isla, de la expresidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, y en una clara referencia a los Estados Unidos.

Quiénes tuvimos el honor y la fortuna de disfrutar de la hospitalidad y el cariño de los taiwaneses, podemos ratificar el enorme espíritu de autodeterminación, libertad y democracia que caracteriza a ese pueblo, lo que ha contribuido a huir del totalitarismo comunista, reinante en la China continental, y convertirse en una potencia industrial del sector de las altas tecnologías, como uno de los primeros fabricantes mundiales de microprocesadores. De ahí que, al igual que con el noble y heroico pueblo ucraniano, será muy difícil someterlo al dominio de una dictadura comunista, mediante una invasión artera. La única victoria que lograrían es adelantar el poco tiempo restante, en el Reloj del Apocalipsis.