Las mypes cierran, se endeudan o cambian de sector por salarios
21/04/2019 - 09:00:29
El Deber.- En su �poca dorada lleg� a tener hasta 30 empleados, ahora solo tiene 11, con el riesgo de quedar en 10 , si es que no tiene la suficiente cintura para negociar el pago del segundo aguinaldo y el futuro incremento salarial de esta gesti�n.
Los servicios de decoraci�n son cada vez menores y la comercializaci�n de flores naturales m�s espor�dicas, por lo que las ventas han bajado, mientras se suma el pago del segundo aguinaldo y los incrementos anuales de los salarios. En este escenario, Rossy Aguilera que lleva 40 a�os en esta actividad asegura que como pocas veces est� contra la pared y con la soga al cuello y que de seguir as� tendr� que dar un paso al costado y cerrar lo que fue su proyecto laboral de toda una vida.
�Estoy asustada, porque hasta ahora, luego de llegar a un acuerdo con mis trabajadores, todav�a no les pude cumplir con el pago del segundo aguinaldo. Estoy endeudada para pagar este beneficio social que es una locura y para abonar los $us 53.000 de una deuda injusta a impuestos. No tengo ahorros y si no ser�a por mi marido que me ayuda con los gastos estar�a quebrada�, lament� Rossy.
La que no pudo mantener sus emprendimientos fue Sarita Murillo que tuvo que elegir entre seguir con la producci�n de prendas en tela de jeans para damas y exportar al inestable mercado venezolano o continuar con el servicio de alquiler de veh�culos a las petroleras.
Sarita le puso un freno a su actividad textil, debido a que un acuerdo con La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra Am�rica - Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), determin� que a Sarita y a las dem�s micro y peque�as empresas (mypes), que exportaban a ese pa�s recibir�an el pago del 30% y el resto, una vez entregado todo el producto, le iban a pagar en un determinado plazo. El pago nunca se cumpli�, seg�n Sarita, debido a que Venezuela no contaba con divisas que junto con la burocracia le generaron un hueco financiero que no pudo soportar y prefiri� retirarse y poner en el �congelador� su emprendimiento de manufactura textil.
Con un poco m�s de aire, Sarita centr� su esfuerzo para mantener a flote el servicio de alquiler de veh�culo a las petroleras, para ello us� la estrategia de los empleados eventuales que le permite tener m�s oxigeno debido a que se ahorra el pago de los beneficios sociales, aunque los pocos trabajadores fijos que le quedan a la hora de pagar sus beneficios sociales siguen siendo un dolor de cabeza, debido a que sus ingresos bajaron, porque la actividad petrolera redujo su dinamismo optando por una pol�tica de austeridad y un contrato m�s moderado con las empresas que brindan servicios, de alimentaci�n y transporte.
�Son tres a�os donde cada vez es m�s dif�cil trabajar. Para seguir adelante, hay dos opciones: endeudarse o reducir el personal, no se olvide que somos mypes; que no tenemos un capital importante para reinventarnos. El doble aguinaldo y los incrementos salariales son una traba que en muchos casos nos obliga a cerrar antes de ser sancionados por no cumplir con las normas�, dijo Sarita.
Seg�n el estudio del Centro Boliviano de Econom�a (Cebec) dependiente de la C�mara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), La pol�tica laboral ha sido contraproducente para la creaci�n de empleo formal e implica riesgos para nuevos emprendimientos. Contextualiza estas historias al indicar que el incremento salarial en las actuales condiciones: baja producci�n, menos ventas y ca�da de los precios, no puede ser r�gido y generalizado.
Pablo Mendieta, subgerente del Cebec, alerta sobre la necesidad de tomar en cuenta estos aspectos si se quiere que las mypes sigan vigentes y no se vean forzadas a cerrar por no cumplir con los beneficios sociales.
El economista explic� que al ser fijo el porcentaje de la suba salarial, el mismo presiona a los emprendedores que ven reducir sus ventas, en donde los precios bajan afectando su productividad, algo que a criterio de Mendieta provoca un desequilibrio entre ingresos y gastos, haciendo dif�cil la permanencia de las mypes en el mercado.
Otro aspecto que se�ala el informe es que el Salario M�nimo Nacional (SMN) creci� en un promedio de un 13,4% en el periodo 2006-2018, acentu�ndose entre el 2012 y el 2018 donde el SMN aument� en un promedio de un 16% pasando de Bs 1.000 a Bs 2.060, mientras que el crecimiento de la econom�a del pa�s en similar periodo en promedio fue de un 6,62%. En 2013 fue un 6,8% y 2014 con un 5,5%, los a�os de mejor desempe�o del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que en 2018 el mismo fue de un 4,7%.
En contrapartida, Mendieta hace notar que las ventas que se miden a partir de las recaudaciones del Impuesto al Valor Agregado (IVA) entre 2005-2015 tuvieron un aumento promedio de un 15%, para luego entre 2015 y 2018 no registrar ning�n incremento y quedar en los Bs 10.580 millones (2015), mostrando una baja en 2016 (Bs 10.063 millones) para quedar en Bs 10.566 millones en 2018.
En cuanto a la recaudaci�n del Impuesto sobre las Utilidades de las Empresas (IUE) entre 2015 y 2018 la misma baj� en promedio un 6,5% pasando de Bs 12.302 millones en 2016 a disminuir en 2018 a Bs 10.066 millones.
Sobre estos n�meros, Jhony Mercado, expresidente del Colegio de Economistas de Bolivia, indic� que es una realidad objetiva que no se puede desconocer y que el incremento salarial y especialmente el segundo aguinaldo son medidas pol�ticas que no toman en cuenta el da�o que generan en las micro, peque�as y medianas empresas.
Mercado indic� que la l�gica del Gobierno, que considera que un mayor salario junto a un doble aguinaldo generar� un mayor circulante y por ende m�s consumo, se cae por los datos expuestos.
�Hasta el momento, el 15% del segundo aguinaldo destinado para comprar la producci�n nacional no est� salvando a las mypes y pymes�, sostuvo Mercado.
Ajena a las decisiones de la Casa del Pueblo, Heidi Erazo, propietaria de una peque�a empresa dedicada a la comunicaci�n visual que hace 10 a�os est� en el mercado, hace tres a�os tuvo que cerrar sus oficinas en La Paz, porque las cargas sociales pusieron en rojo sus n�meros. Ahora, de los 20 operarios que ten�a, solo quedan seis y mira con temor que dos de sus trabajadoras est�n embazadas, lo que va a significar un aumento en las cargas sociales, lo que puede quebrar sus an�micas finanzas
