Colombia: Los secretos de la red de la Madame
04/08/2018 - 09:18:04
El Espectador.- Las investigaciones realizadas por un grupo especializado de la Dij�n y de la Fiscal�a lograron evidenciar de qu� manera operaba la red de explotaci�n sexual que Liliana del Carmen Campos cre� a trav�s de mujeres de estratos medios y altos.
Liliana del Carmen Campos no acept� los delitos que le imput� la Fiscal�a. �El Heraldo�
�Dejen de joderme la vida, porque voy a echar al agua a todos los pol�ticos que me contrataban�, advirti� Liliana del Carmen Campos, conocida como la Madame, supuesta l�der del rentable negocio de explotaci�n sexual en Cartagena, en momentos en que era enviada a la c�rcel de mujeres de San Diego, por orden del Juzgado Segundo Penal Ambulante de la capital de Bol�var. Ella forma parte de las 18 personas que fueron capturadas el fin de semana anterior, en el marco de una operaci�n desarrollada simult�neamente por la Polic�a y la Fiscal�a contra este flagelo que est� afectando a diario a esta ciudad tur�stica del Caribe colombiano.
Seg�n la investigaci�n, ella cumpl�a roles espec�ficos y ostentaba una millonaria riqueza, luego de formar, en compa��a de un israel�, una red ilegal de prostituci�n que les representaba significativos dividendos econ�micos. Todo a costa de mujeres, entre ellas varias menores de edad, a quienes pagaban cifras irrisorias por vender su cuerpo para que turistas colombianos y extranjeros abusaran de ellas. El Espectador tuvo acceso a parte de la informaci�n recolectada por los investigadores de la Dij�n que, a trav�s de labores de inteligencia, seguimientos, inspecciones, interceptaciones y recaudo de testimonios de las v�ctimas, puso en evidencia el actuar il�cito de la organizaci�n.
En 2003, aseguran los investigadores, la cartagenera Liliana del Carmen Campos, de 42 a�os, hab�a sido condenada en Estados Unidos por tr�fico de estupefacientes. Pag� dos a�os de prisi�n y, en 2005, fue deportada a Colombia. A su regreso decidi� apostar al negocio de la explotaci�n sexual, y para ello constituy� una falsa agencia de turismo para extranjeros. Lo logr� r�pidamente utilizando j�venes de la ciudad. Cuatro a�os despu�s estableci� relaciones con el israel� Assi Mosh, expulsado de Colombia el 17 de noviembre, luego de que las autoridades colombianas recibieran denuncias en su contra. Hoy es buscado a trav�s de una circular azul de la Interpol.
El israel� ya se estaba enriqueciendo con el mismo negocio de la explotaci�n sexual que desarrollaba la Madame, pero ten�a una ventaja: su acceso a militares israel�es que hab�an culminado su servicio y ten�an cuantiosos honorarios por su labor. Ellos fueron sus primeros clientes. A sus connacionales, Assi Mosh les presentaba un atrayente portafolio de servicios sexuales que los atra�a al pa�s en busca de mujeres colombianas. Mosh aprovechaba adem�s el auge de las discotecas en Cartagena para incrementar considerablemente su actividad ilegal. �Los proxenetas, al observar que no hab�a actividades de Polic�a contra la presencia de prostitutas, poco a poco se fueron tomando diversas zonas de la ciudad heroica�, coment� uno de los investigadores.
Clasificaci�n de las mujeres por estrato
El negocio se volvi� muy rentable, porque la estructura aprendi� a reclutar a mujeres que, por su condici�n de vulnerabilidad o precaria situaci�n econ�mica, acced�an a ser explotadas. �En la psiquis de las v�ctimas, ellas no se ven as�. Uno hablaba con ellas, mayores o menores, y era claro que la doctrina de esta organizaci�n era muy fuerte. Constantemente les estaban diciendo: �D�jese ayudar�, �hagan lo que yo le diga� o �cumplan las cosas como yo diga�. Eran maneras de manipularlas y someterlas a lo que ellos ordenaran�, coment� uno de los investigadores. La Madame, seg�n informaci�n aportada a este diario, prefer�a buscar mujeres de estratos medios y altos para clientes espec�ficos.
Las mujeres reclutadas en estratos medios, por lo general de familias con antecedentes de padrastros abusivos o con familiares que las motivaban a ingresar a este mundo, eran ubicadas en lugares estrat�gicos como la Torre del Reloj o la Plaza de los Coches, en Cartagena. All� los proxenetas las acompa�aban los primeros d�as para ense�arles c�mo negociar sus servicios con clientes nacionales e internacionales �de al menos cinco pa�ses� y los hoteles que deb�an utilizar para no levantar sospechas. Despu�s de varios d�as, el acompa�amiento de los proxenetas se hac�a a distancia. �En las labores de vigilancia llegamos a identificar 300 prostitutas en la Torre del Reloj�, recalc� uno de los peritos.
En los estratos altos de la ciudad, la red operaba de manera diferente. En este caso, Liliana del Carmen Campos creaba grupos exclusivos, entre 20 y 30 mujeres, que deb�an cumplir con ciertas condiciones para asistir a lujosos eventos. �Las ten�an en casas espec�ficas arrendadas por ella. Eran controladas por sistemas cerrados de televisi�n y las que quer�an pertenecer a este �selecto grupo� ten�an que mandarse a hacer dise�o de sonrisa, cirug�as pl�sticas, estar disponibles para cuando las necesitaran y comprar ropa de marca�, revel� a este diario otro de los investigadores. Si la Madame se enteraba de que alguna de las mujeres estrechaba sus relaciones con los clientes, eran expulsadas del grupo.
Como �Eventos Cartagena� fue identificado un grupo de Whatsapp que la Madame fund�. En ese chat estaban las mujeres que controlaba y otras que llegaban de Medell�n, Bucaramanga, Bogot� y Cali. �Ella dec�a: �Evento en yate, se necesitan 20 mujeres: �qui�nes est�n disponibles?� Las mujeres se postulaban y ella las escog�a de acuerdo con su perfil�. Las autoridades lograron identificar que a veces llevaba a las fiestas el doble de mujeres que los clientes solicitaban.
Los alcances internacionales de la Madame
Producto de la fruct�fera sociedad il�cita, los investigadores detallaron que Liliana del Carmen Campos surt�a con mujeres a los israel�es que se hospedaban en la casa Benjam�n, un hostal vinculado a Moosh y que fue objeto de extinci�n de dominio esta semana. En ese hospedaje se realizaba bacanales, denominados Benjafest, con alto consumo de estupefacientes. Estas casas se identificaron hostales similares o en construcci�n en Taganga (Santa Marta), Palomino (La Guajira), Medell�n (Antioquia), San Gil (Santander) y en Bogot� (Cundinamarca).
As� como ten�an clientela en el pa�s, desde otras naciones se comunicaban con la Madame para solicitar el servicio de colombianas para realizar m�ltiples festejos. La Polic�a y la Fiscal�a identificaron peticiones desde M�xico, Bahamas, Costa Rica e islas del Caribe. Para ello, la Madame transportaba a las mujeres en diferentes vuelos con escalas en varios pa�ses de tr�nsito para no ser detectados por las autoridades. Una vez arribaban a los destinos programados, explicaron los investigadores, se les hac�an las respectivas transferencias bancarias.
�Era una empresa criminal perfectamente planeada para aludir todos los controles�, explic� un investigador de la Dij�n, quien agreg� que a cada mujer le pagaban US$3.000. De ese dinero, Madame le daba a cada colombiana US$1.000 y ella se quedaba con el resto. Las labores de inteligencia de los investigadores, conocidas por El Espectador, dicen que uno de los clientes m�s ac�rrimos era la organizaci�n criminal conocida como La Oficina y que la seguridad a los israel�es se la brindaban hombres pertenecientes al clan del Golfo.
Aunque Liliana del Carmen Campos se declar� inocente por los delitos de concierto para delinquir, trata de personas e inducci�n a la prostituci�n, las pruebas de la Fiscal�a demuestran que no la tiene f�cil. Quiz� por eso fue clara en advertir que est� dispuesta a prender su ventilador.
