Los asesinatos satánicos desatan la psicosis en Sudáfrica
29/03/2014 - 11:12:35
Thandeka Mogantesi y Chwayita Rathazayo, de 15 y 16 a�os, fueron encontradas sin vida el pasado 19 de febrero en un descampado de Dobsonville, Soweto, vestidas con sus uniformes del colegio. Presentaban cortes en las manos y en el cuello. Los investigadores hallaron velas negras y cuchillas de afeitar en la escena.
Dos compa�eros de clase de las v�ctimas, Thiko y Tumelo, fueron arrestados en conexi�n con el asesinato. Desde la c�rcel, declararon estar pose�dos por el diablo. Fumaban porros, le�an la Biblia sat�nica y sacrificaban animales. Beb�an sangre.
Tumelo conoci� el satanismo en un concierto, y comenz� a buscar informaci�n en Internet tras escuchar que esta pr�ctica le traer�a poder y riqueza. Para los j�venes de estos barrios marginales de Johannesburgo, v�ctimas frecuentes del maltrato y los abusos, salir de la miseria y el tormento parece obra de un pacto con el diablo.
Quemada viva
Es el �ltimo asesinato ritual que investiga la Polic�a sudafricana. En otro incidente separado, tres hombres fueron condenados a cadena perpetua el pasado jueves por el asesinato de una joven de 16 a�os. Hace meses, una menor fue quemada viva en un suceso similar.
Solo en la comarca de Johannesburgo, la Unidad de Pr�cticas Religiosas Perjudiciales de la Polic�a investiga hasta 48 cr�menes relacionados con el ocultismo en los �ltimos tres meses.
Los tabloides sudafricanos publican blanco sobre negro cada d�a nuevos supuestos casos, org�as sat�nicas de marihuana y sexo, acrecentando los temores de una sociedad donde las creencias en lo sobrenatural est�n profundamente arraigadas.
Alertan sobre el aumento de j�venes de raza negra envueltos en estas pr�cticas
El pastor evangelista Hennie de Jager, teniente coronel de la Polic�a y director provincial de la Unidad de Pr�cticas Religiosas Perjudiciales, convoc� una rueda de prensa para alertar a los padres sobre el incremento del n�mero de j�venes, principalmente de raza negra, envueltos en pr�cticas ocultistas.
Seg�n de Jager, los adolescentes son captados con promesas de riqueza y poder, se les administran drogas y se les obliga a participar en rituales que a menudo incluyen violencia y abusos sexuales.
De Jager pidi� a los padres que est�n atentos a cualquier signo de que sus hijos puedan haber ca�do en el satanismo. Los s�ntomas incluyen "rebeli�n, baja autoestima, consumo de drogas y alcohol, cambio de amistades, marcas en el cuerpo, maltrato animal, dejar de ir a misa con la familia o un inter�s inusual en libros o pel�culas ocultistas".
La Polic�a no ha desarticulado hasta ahora ninguna secta que capte a adolescentes con estos fines y no ha aportado ninguna evidencia sobre la existencia de tales grupos. El coronel De Jager rehus� hablar con ABC para confirmar estos indicios y se remiti� al contenido de su rueda de prensa. Pero los mensajes de las autoridades han desatado ya la psicosis colectiva.
"Es el p�nico sat�nico", explica Nicky Falkof, doctora en Humanidades y Estudios Culturales de la Universidad de Witswatesrnad. "Es el p�nico moral; un peligro imaginarioen el que depositamos nuestros miedos. Nos facilita un enemigo que representa todos los males de la sociedad".
"Lo cierto es que no existe culto sat�nico en Sud�frica. Los medios difunden la informaci�n y cuanto m�s hablemos de ello, m�s chicos emular�n lo que oyen en las noticias, m�s chicos se llamar�n a s� mismos sat�nicos. La mayor�a encuentra la informaci�n en Internet, de grupos que se autodenominan sat�nicos o de propaganda �antisat�nica� de grupos evangelistas".
Pero los satanistas en Sud�frica existen. Christina Engela, miembro de la Alianza Paganista de Sud�frica y autora del estudio "Satanismo. La prueba del �cido", los cuenta entre sus amigos. El satanismo es una religi�n individualista, por lo que sus practicantes no suelen "reclutar" a otros miembros, asegura Engela. En Sud�frica no existen iglesias sat�nicas y sus rituales suelen ser privados.
La asociaci�n defiende los derechos en Sud�frica de las religiones paganas, y rechaza que los ritos sat�nicos incluyan abusos sexuales, sacrificio de animales o violencia, aunque reconoce que puede haber grupos pseudo-satanistas que no conocen la religi�n y adultos que invocan el nombre del diablo para atemorizar o embaucar a sus v�ctimas.
"La oposici�n es sat�nica", ha llegado a decir el oficialista CNA
"La mayor�a de los signos, como la cruz invertida o el n�mero 666, no tienen en realidad nada que ver con el satanismo", asegura Engela a ABC. "Gente f�cil de impresionar o con problemas sociales o psicol�gicos se identifican con la imagen que propagan los medios y comienzan a actuar de acuerdo con la leyenda creada por ellos, cometiendo abusos, asesinatos, porque eso es lo que se supone que hacen los sat�nicos".
Aunque solo sea por algo que leyeron en Internet, aunque esas marcas que se dibujan en los brazos no tengan fundamento alguno, lo cierto es que algunos j�venes sudafricanos han encontrado en el satanismo el veh�culo para cometer las m�s terribles atrocidades.
"Los chicos del crimen de Dobsonville fueron v�ctimas de abusos. La gente con fuertes creencias m�sticas pueden llegar a identificar todo el mal que han vivido con el diablo. Creer�n en ello realmente. Pero no se trata de eso. Lo que debemos preguntarnos es por qu� tenemos una sociedad tan violenta, por qu� nuestros j�venes son capaces de estas atrocidades. Hay algo profundamente enfermo en este pa�s".
"Es m�s f�cil para nosotros no asumir la culpa. Si todo esto est� ocurriendo porque nuestros j�venes crecen en una cultura de violencia, entonces somos responsables. Si ocurre porque han sido envenenados por el satanismo, entonces no es culpa nuestra".
Al final de apartheid
La alarma por los cr�menes rituales en Sud�frica comenz� en los a�os 80, en los �ltimos a�os del r�gimen racista del apartheid, principalmente entre la minor�a blanca que no se ajustaba a las reglas. El satanismo se asociaba con el divorcio, la homosexualidad; con la degeneraci�n moral que traer�a el final de la segregaci�n racial: el desmoronamiento de los valores minor�a blanca sudafricana.
Hoy, apunta Falkof, es un mecanismo para "demonizar" a la juventud negra. "Es una buena manera de disciplinar a la juventud. En este pa�s hay una gran tensi�n entre la modernidad y la tradici�n. Existe la percepci�n de que la juventud negra est� fuera de control. No respetan el sistema, no respetan a sus padres como debieran. Los j�venes son peligrosos y deben ser controlados", explica.
El "p�nico sat�nico" ha cundido en los "townships" (municipios) azotados por el consumo de drogas, la violencia y la falta de expectativas de los j�venes de la Sud�frica post-apartheid. Lo utiliza, incluso, el gubernamental Congreso Nacional Africano. "La oposici�n es sat�nica", publicaron recientemente los tabloides, con enormes letras blancas sobre fondo negro. (ABC.es)
http://www.abc.es/internacional/20140329/abci-asesinatos-satanicos-desatan-psicosis-201403281749.html
