Tiene 100 años y lleva más de 50 trabajando como terapeuta sexual en Nueva York.
Shirley Zussman,
tras nacer en los comienzos de la I Guerra Mundial, vivió la revolución
sexual y aparición de la píldora en los años 60, los temores sobre el
sexo libre ante el Sida en los 80, y como ella dice, la “falta de
conexión real” que hoy provoca la pornografía en internet, los
smartphones y el vivir corriendo por acaparar más.
“El uso del tiempo es muy diferente hoy”, dice ella en
Time,
a propósito de cómo han cambiado las cosas desde los comienzos de su
carrera como sexóloga. “La gente está ocupada todo el tiempo (…) En esta
etapa de desarrollo queremos cubrir todo, saberlo todo, hacerlo todo”.
A
todo esto, Zussman agregó cómo hoy la economía personal también tiene
un lugar privilegiado entre las prioridades de las personas, quienes
destinan una inmensa cantidad de tiempo y esfuerzo para acrecentar su
dinero.
“El tiempo y energía que le destinas a una persona se
limita cuando existe toda esta presión de hacer más y más dinero, de ser
el gerente general, de comprar la casa de veraneo; la gente quiere más y
más y más. (Pero) el deseo requiere una cierta cantidad de energía”,
explicó.
La consecuencia de este ritmo de vida, según la
sexóloga, es que hoy las personas parecen estar siempre cansadas,
desencadenando una falta de interés y apetito sexual. “Tuve una paciente
que me dijo: ‘Amo a mi esposo, me encanta hacer el amor con él, pero
llego a la casa después del trabajo y de haber estado todo el día con
gente, así que solo quiero dormir”.
Internet y los smartphones, los enemigos del sexo del siglo XXI
Lejos
de criticar a la pornografía en sí –“es saludable que la gente pueda
permitirse fantasear con libertad”, dice-, Zussman repara en la cantidad
de pacientes que han llegado a su consulta luego de que su hábito de
ver pornografía online los haya dejado sin interés en conocer una
posible pareja.
“Lo veo mucho en algunos hombres solteros que no
hacen el esfuerzo de salir al mundo y enfrentar los problemas, como un
posible rechazo, así que satisfacen sus necesidades sexuales sentándose
frente a un computador y masturbándose”, explicó.
Acerca de la
irrupción de los celulares en la vida cotidiana de la gente, la
centenaria sexóloga dijo estar impresionada en cómo éstos han provocado a
su vez, una falta de conexión real entre las personas.
“(Hoy)
hay mucho menos conexión física real. La gente se toca menos, habla
menos, se abraza menos y se mira menos. Pero la gente obtiene placer
mirándose el uno al otro; de una sonrisa y de tocarse.
Necesitamos
tocarnos para sentirnos queridos y amados. Eso es de lo que más falta
en esta generación (….) Y no entiendo cómo la gente no extraña estas
cosas”, comentó.
http://www.emol.com/tendenciasymujer/Noticias/2014/09/08/26095/Sexologa-de-100-anos-recomienda-dejar-de-acaparar-dinero-y-soltar-los-celulares.aspx