Los juanetes son un agrandamiento de la articulación de la
base del dedo gordo del pie que se produce al desplazarse el hueso o el
tejido de la articulación del dedo gordo. Como consecuencia se presenta una inflamación que resulta dolorosa en la mayoría de los casos y si no se trata a tiempo se puede convertir en un grave problema de salud.
Síntomas de los juanetes
Identificar los juanetes resulta muy sencillo ya que se pueden ver a simple vista en nuestros pies, entre sus síntomas más comunes está la hinchazón y el extremo dolor, pero también hay otras formas de identificarlos:
- En el borde extremo del pie se desarrolla un bulto firme sobre la base del dedo gordo.
- La articulación metatarsofalángica comienza a presentar enrojecimiento, hinchazón, y/o dolor.
- Aparecen callos, ampollas u otro tipo de irritaciones.
- El dedo gordo del pie presenta un movimiento limitado y doloroso.
¿Cuál es la causa de los juanetes?
Los juanetes se forman cuando se altera el equilibrio de fuerzas que
se ejercen sobre las articulaciones y los tendones del pie. Como consecuencia se presenta una deformación en el pie e inestabilidad de la articulación.
Diferentes estudios han demostrado que los juanetes pueden aparecer por factores hereditarios, la forma de caminar, el uso de tacones u otro tipo de calzados, entre otros. También se han presentado casos de juanetes debido a heridas en el pie, desórdenes neuromusculares, o deformidades congénitas.
Consejos para prevenir los juanetes
- Se debe evitar el uso de calzado apretado y optar por uno que le permita tener movilidad al pie.
- El uso de tacones o zapatos en punta, ayudan a desarrollar con más facilidad los juanetes ya que expone el pie y el dedo gordo a sufrir más presión.
- Usar separadores interdigitales ayudan a corregir la dirección de los dedos durante la noche.
- Consultar con un especialista para que le recomiende un protector de algún material suave y blando con el fin de reducir el dolor de los juanetes y evitar que rocen con el calzado.
- Consumir vitaminas A y C, calcio y vitamina D para fortalecer los huesos.
- Se puede adquirir férulas especiales para juanetes, las cuales ayudan a corregir la deformidad del hueso y evitan que se agrave para que no sea necesaria una cirugía.
- Mantener un peso equilibrado para evitar la obesidad, la cual es un problema causante de juanetes.
¿Cómo tratar los juanetes?
Existen varias formas de aliviar los juanetes sin que sea necesaria una intervención quirúrgica. Para saber cuál es el tratamiento ideal para el juanete, se debe
identificar la gravedad que tiene y actuar antes de que la deformidad se
convierta en un problema más grave. A continuación te dejamos algunos tratamientos para aliviar la presión sobre el juanete y detener la progresiva deformación de la articulación.
Acolchado y vendado
En un plan de tratamiento, lo primero que se debe hacer es acolchar el juanete. Las vendas ayudan a mantener el pie en una posición normal, reduciendo la presión y el dolor.
Tratamiento para desinflamar
Uno de los síntomas más comunes de los juanetes es la inflamación en
los pies y el dolor. Para reducir este problema puedes hacer un
tratamiento muy común y eficaz que no te costará mucho y solo te quitará
unos minutos.
¿Qué debes hacer?
- Pon a hervir 3 litros de agua y luego deja reposar.
- Añade 5 cucharadas de sal gruesa y luego remoja los pies durante 15 minutos.
- Otra opción es poner hielo en la zona afectada. Para esto solo
tendrás que poner cubos de hielo en una bolsa o envueltos en una toalla.
Se debe evitar poner el hielo directamente sobre el juanete.
Tratamiento con lavanda
Este tratamiento ayuda a aliviar las dolencias provocadas por los juanetes, es ideal para reducir la inflamación y previene la aparición futura de este problema.
Vas a necesitar:
- 200 gramos de flores de lavanda.
- ¾ de aceite de girasol
¿Qué debes hacer?
- Coloca 100 gramos de flores de lavanda y ¾ de aceite de girasol en un recipiente metálico. Luego calienta por 2 horas al baño maría.
- Pasado el tiempo se debe filtrar el aceite sobre una cazuela, luego
agregar otros 100 gramos de flores de lavanda y poner de nuevo 2 horas
al baño maría.
- Para terminar se debe filtrar de nuevo el aceite y aplicar unas cuantas gotas en la parte afectada.