PresentaciónTurísmoBlogshoybolivia | FacebookJuegosRSSYoutubeTwitterMóvil
Jueves 28 de marzo 2024 Contacto
InicioPortadaDestacadasEspecialesBoliviaTemas
CuriosidadesEspectáculosArte y CulturaHoy EventosMujer

           
Fernando Rodriguez Mendoza

La marca del destino


2014-04-21 - 15:55:18

Si destino es la circunstancia favorable o adversa a uno, una manera de ocurrir los sucesos a alguien o a algo; a esta región donde está Bolivia, incluso mucho antes de que siquiera se pudiera pensar en su existencia, se la marcó a fuego con actividades simplemente ‘extractivas’ y no productivas, y mucho menos industriales y de creación intelectual.

Bolivia tiene un sino, sustantivo masculino que se interpreta como ‘fatalidad o destino’, el sino de tener una economía extractiva de recursos naturales. En la Colonia, los conquistadores buscaban únicamente extraer lo máximo de las riquezas minerales de la región, donde en el futuro iba a crearse primero una República y después, destrozando esta, un Estado Plurinacional. Y esa mentalidad extractiva de explotación de los minerales no cambió nunca, primero para un reino allende los mares, luego para los ‘barones del estaño’, que también llevaban su riqueza a otros continentes, y después para el Estado (republicano o plurinacional), que con su innata ineficiencia gubernamental, enriquecía a sus adláteres; mientras, en todas y cada una de esas etapas las riquezas no llegaron al pueblo.

Las políticas de éste y de los anteriores Gobiernos buscaban satisfacer demandas e intereses de muy corto plazo de sectores que, dependiendo del momento, eran vitales para el respaldo de dichas administraciones, ya sea por temas electorales, por relaciones, por sustento político o por simple instrumentalización, como en el actual caso de los reclamos de los cooperativistas mineros.

No existieron ni existen políticas para superar las distorsiones estructurales de la economía nacional, basada únicamente en los precios de las materias primas, ratificando así la mentalidad simplemente extractiva. Es una afrenta, para el poder político, pensar en cambiar la matriz de exportaciones de minerales y otros productos no tradicionales, por una matriz de industrialización y de generación de valor agregado. Mucho menos siquiera soñar en la incorporación de la tecnología en todos los campos.

No vislumbramos en el corto y mediano plazo un cambio en la mediocridad de este país.

Copyright © Hoybolivia.com Reservados. 2000- 2024
Optimizado para Resolución 1024 X 768 Internet Explorer 4.0, Netscape 4.0, Mozilla Firefox 2.0