PresentaciónTurísmoBlogshoybolivia | FacebookJuegosRSSYoutubeTwitterMóvil
Jueves 28 de marzo 2024 Contacto
InicioPortadaDestacadasEspecialesBoliviaTemas
CuriosidadesEspectáculosArte y CulturaHoy EventosMujer

           
Humberto Vacaflor Ganam

La Bolivia que camina


2012-03-27 - 23:05:08

Un excelente informe del periodista Hilton Heredia (El Deber) reveló que las zonas rojas del narcotráfico cuentan con una provisión infalible de carburantes, más caros que en el resto del país, pero seguros.

En todo el territorio comprendido por la influencia del Chapare y las zonas cocaleras aledañas, dentro del departamento de Santa Cruz, existen los “puntos blancos”, donde cualquiera puede comprar los volúmenes que desee de gasolina o diesel, pagando Bs 7 por litro, es decir el doble del precio oficial.

Para el resto de los bolivianos se aplican restricciones muy severas desde hace dos semanas para la compra de gasolina y diesel en bidones.

Quienes necesitan diesel para mover equipos industriales o tractores para el agro, o solamente para combatir las termitas de la madera, deben hacer un trámite que dura varios días.

Como solución, la que practica la Bolivia ilegal y clandestina es más eficiente, porque aplica el principio de la libre oferta y demanda, mientras que el sector legal debe vérselas con trámites engorrosos ideados por poco imaginativos burócratas.

El gasolinazo ya ha sido aplicado y aprobado por los narcotraficantes del Chapare y su zona de influencia, contando con la seguridad de que el sistema de distribución de los carburantes por parte de YPFB es un caos. Controla los bidones pero no los camiones cisterna.

Los “puntos blancos” donde se puede comprar carburantes en la “zonas rojas” del narcotráfico cuentan con el seguro abastecimiento de parte de camiones cisterna cómplices.

Si esos camiones llegaran a tener problemas para mantener la provisión, el capitalismo salvaje que opera en la zona se las arreglaría para mejorar la oferta de premios a los burócratas.

Si el precio tuviera que subir todavía más, no habría problema. El margen de utilidad que tiene la actividad ilegal es tan grande que podría incluso duplicar el precio internacional de la gasolina y el diesel. Los bolivianos del sector legal de la economía, en cambio, tienen márgenes de utilidad que no les permiten comprar carburantes a precios mayores ni acceder al brazo pecaminoso de venta de carburantes.

La realidad que viven las dos Bolivias se hace cada día más diferente, desigual e injusta.

Copyright © Hoybolivia.com Reservados. 2000- 2024
Optimizado para Resolución 1024 X 768 Internet Explorer 4.0, Netscape 4.0, Mozilla Firefox 2.0